A lo largo de estos últimos años hemos visto cómo empresas han logrado patentar prácticamente cualquier cosa, desde sistemas que registran nuestras emociones para ser utilizado en consolas hasta la de un ruso que logró patentar el emoticon de “;-)”.
Considerando estos dos simples ejemplos no resulta extraño que Google haya logrado finalmente patentar su página de inicio, luego de cinco años de arduo trabajo por parte de sus abogados que lograron convencer a la oficina de patentes de los Estados Unidos.
En el informe de la patente se puede apreciar lo escueto de la descripción de la misma, limitándose a mostrar una imagen donde podemos ver el minimalista diseño de Google.Con seguridad quienes no estarán muy contentos con esta noticia serán las otras compañías que utilizan diseños similares en sus buscadores, quienes se podrían ver afectadas si es que la gran G opta por hacer respetar sus derechos recientemente patentados.
